En mi barrio ya sólo se saca los contenedores amarillos tres días por semana. Curiosamente,los supermenrcados abren los domingos. Menos derechos y más mercado. En Girona cierran los cubos de basura con candados. Les da miedo la imagen de la pobreza, no la pobreza en si. Europa tira comida a espuertas y a este ayuntamiento sólo se le ocurre convertir los cubos en cajas fuertes. Comer en un colegio público en Madrid sale más caro que comer en el restaurante de la Asamblea de la Comunidad Autónoma. Los parlamentarios autonómicos tienen mucha más oferta y ni qué decir, mucho más sueldo.
Ayer vimos sacar carritos de la compra llenos de dinero negro, fruto de una redada. Era una red que operaba en un pólígono, no las obras sociales de las extintas cajas de ahorros, ese saqueo no tien foto, lástima. Vivimos una época de paradojas, pero no podemos perder la perspectiva, no hay que salir de ninguna crisis, hay que salir de la estafa.